Todos eran excelentes y extremadamente agradables. La cama era bastante buena, el baño muy limpio. - El servicio fue estupendo, nos ofrecieron WiFi gratis muy bueno.

Las habitaciones con una ducha maravillosa, un teléfono, una terraza. Unos servicios estupendos.

¡Para ser sincero, nada que no me haya gustado!

La vista era estupenda, el desayuno bastante bueno y las camas cómodas. El personal era muy amable y muy servicial y todas las facilidades proporcionadas fueron buenas. Ubicación: el hotel estaba a pocos pasos de un parque y también de la estación de autobuses. Salimos a cenar y encontramos Shakerato, que estaba a una distancia media del hotel.

Una estancia ideal en el corazón de la ciudad! Este hotel ofrece una excelente relación calidad-precio y una atención al cliente destacable. Está ubicado a solo 100 metros de la estación de tren, lo cual facilita mucho los desplazamientos. Además, el personal del hotel, como Johanna, es muy amable y siempre dispuesto a ayudarte con todas tus necesidades.

Todo fue estupendo, no hay aspectos negativos.

Reservamos una habitación doble pero cuando llegamos al hotel no había habitaciones dobles; nos dieron dos habitaciones individuales, cada una en una planta distinta y en una de las habitaciones individuales la calefacción no funcionaba y faltaba el secador de pelo; reclamé a la recepción del hotel pero no hicieron nada por solucionarlo.

Varias bombillas ,fundamentales, fundidas y sin intencion de reponerlas. Llega con exceso el ruido de la calle y del corredor.

El desayuno estaba muy bueno, había muchas opciones diferentes para elegir. Nos encantaron las habitaciones, especialmente el baño. 🌟

Lo único bueno del Hotel es que tiene un bar en la planta baja donde dan música en directo los sábados

Las habitaciones muy pequeñas, poco confortables. Los baños muy pequeños, poco cómodos. El armario muy pequeño, con sólo 2 perchas en habitación doble. Nunca había nadie en recepción.

Me encantó alojarme en este hotel en el centro de la ciudad. La ubicación era perfecta, cerca de varios restaurantes y a solo unos pasos de la estación de tren. La habitación era cómoda y el baño estaba limpio. El servicio fue amable y atento, especialmente Johanna, quien siempre estuvo dispuesta a ayudarme. Además, el desayuno ofrecía una buena variedad de opciones para comenzar el día. Definitivamente, volvería a quedarme aquí por su ubicación y excelente servicio.

El único inconveniente fue que el hotel estaba un poco caro en comparación con otros alojamientos de la zona cercana al centro de la ciudad.

En el corazón de la ciudad. A 100 metros de la estación de tren. Personal amable y dispuesto a ayudarte. Habitación con nevera a petición.

Ni una sola cosa.